El 2008 en lo personal no fue para mi un gran año, ya que me rompí una vertebra en abril, "paseando" por la oficina, que aún ahora me está dando problemas. El 2009 no está arrancando mejor, por lo que entre una cosa y la otra no encuentro tiempo, ni las suficientes ganas para cocinar, y menos para contarlo después por aquí.
Hace un par de semanas, después de una mañana de trabajo intenso pero poco satisfactorio, fui a comer con mi jefe, y al pasar por la puerta de Da Greco, decidimos darnos un pequeño homenaje (pagábamos nosotros), comiendo en este curioso restaurante de Barcelona.
Tiene un menú degustación al mediodía de 18 euros, diréis: homenaje de 18 euros???, entenderéis que no es cuestión de gastarse esa cantidad para comer a diario, por lo que fue un pequeño extra, para relanzar un día que no empezaba bien. Acabamos pagando 20 euros por persona.
El Da Greco está en el Paseo de Gracia, en el numero 116 bis, y tiene como entrada una misteriosa puerta dorada, totalmente opaca sin ventanas, y con aire barroco. La puerta no da ninguna pista de lo que encontraras dentro, y no hay información de carta ni de precio fuera. Si no lo conoces es difícil decidirte a entrar, pero siempre está lleno, además es bastante grande.
Yo ya había estado una vez, cuando abres la puerta da la impresión que vas a encontrarte en medio de una escena rollo "Eyes Wide Shut", la última película de Kubrick, por su barroquismo y sobretodo por su misteriosa puerta y el interior que le sigue.
El menú consta de un primero un segundo y 3 platos pequeños, lo que los italianos llamarían assaggini (mini pruebas), de pasta y un risotto, aquí podríamos llamar 4 tapas.
Calidad precio está bien, aunque yo me esperaba más de la pasta, y el rissoto para nada tenía el punto meloso que debe caracterizar el plato. Haber vivido en Italia, seguro que me hace más exigente, en este tipo de comida, que por 18 euros, es una buena opción en un ambiente muy curioso. El Menú está al nivel de la mayoría de los menús de ese precio, un poco mejor que los de 10 euros, la gracia está en la decoración, el ambiente y los "assaggini".
Si invitáis a alguien a comer a Da Grecco, le sorprenderéis sin duda. No se los precios de las cenas, lo del Menú entiendo que es solo para el mediodía. En la ventana que da a la calle, totalmente opaca también para mantener el misterio, hay una foto enorme de la visita de Giovanni Rana (el genio de la pasta) a este restaurante. He tardado em postear esto, porque me faltaba la foto, que he hecho esta tarde.
Espero que te vayas recuperando de tu espalda.
ResponderEliminarA mi la pasta no me molesta tanto si esta al dente o un pelin mas cocida no me importa.
He comido cada dia lo que cocinaba un cocinero Sicilano, y hacia una pasta tropo al dente... incomestible y llena de aceite.
Pero si, tengo unos rifi-rafes con el espresso,nadie lo sabe hacer.
Un día iré a comer, aunque no me suena de nada donde esta este restaurante.Ya lo encontraré.
Gracias por el reportage.
Un abrazo.
Margot
Volvi a entrar esta pasada semana sin reservar, y estaba lleno, al entrar la puerta no se abría y llamamos al timbre. Este punto estraño me gusta. Al final estabamos abriendo mal, pero estoy seguro que entre la puerta, el timbre, y la ausencia de carta y la imagen habrá mucha gente que no entrará, de todos modos mientras lo tengan lleno...
ResponderEliminarYo solo he entrado una vez... hace ya 4 o 5 años... Era un sabado noche temprano y a la tercera o cuarta vez que la "maitre" nos repitió que hacia falta reservar (a pesar de que nos dió mesa) me cansé de tanto "favor" y le dije que "no queria molestar" y me fuí... Intentó disculparse, pero ya habia tomado la decisión... Tampoco me gustaron mucho una banderitas que decoraban las mesas... :-).
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