Mostrando entradas con la etiqueta thermomix. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta thermomix. Mostrar todas las entradas

Vichyssoise de pimientos asados


Ya hacía demasiado tiempo (1 año) que no hacía la vichyssoise de pimientos asados.

Hoy han venido a comer a casa un grupo de amigos del trabajo, aprovechando que en verano, cuando podemos hacemos jornada intensiva.

Eso si hemos empezado a comer a las 16:30, había que hacer algunas cosas, aunque yo ayer ya había preparado muchas de ellas. Nos lo hemos pasado muy bien.

Cuando pensé en el Menú para hoy, pensé enseguida en hacer esta crema fría, tenía muchas ganas de hacerla y degustarla, es genial

Vichyssoise de pimientos asados

Ingredientes:
7 tomates rojos
100 gr. de azúcar
1 kg. de pimientos rojos
125 cl. de aceite de oliva
25 cl. vinagre de jerez
1/2 l de agua
125 cl de nata líquida
sal y pimienta

Preparación:
Para empezar asamos los pimientos al horno (mucho mejor si los podéis asar en una barbacoa o similar, aunque en el horno quedan muy bien). Los untamos de aceite, y al horno fuerte 180 grados 20-30 minutos, depende del horno, de los pimientos etc., o sea que vais mirando. Cuando están hechos la piel se suelta fácilmente.

Mientras tanto, cortáis los tomates por la mitad y los colocáis en una bandeja para el horno. Los aliñáis con azúcar por encima, pimienta negra y un chorrito de aceite. Hay que dejarlos confitar en el horno a unos 100 grados durante una hora o una hora y media, en mi caso al final he subido el horno hasta 150 grados porque después de una hora estaban como antes.

A continuación, hay que pelar los pimientos y los cortarlos en tiras.

Después los trituramos, junto a los tomates confitados, la nata y el agua. Yo en mi casa lo he hecho con la Thermomix porque me ha quedado una crema muy fina que después de rectificar de sal, la he pasado por el colador chino para quitar las pieles del tomate y las que pudiesen quedar del pimiento, y a la nevera durante al menos una hora.

Para acabar, añadimos el vinagre y aceite y la removemos bien.

Para decorar yo le he puesto un dibujito con un poco de nata, también se le puede poner un poco de pan frito, o mil otras cosas.

Hummus. Una divertida manera de comer legumbres


Desde hace poco, me he enganchado al Hummus, por suerte es una adicción muy saludable y económica.

Con la Thermomix lo hago en 5 minutos, y a mis hijos les gusta, bien a uno más que a otro, pero se lo comen bastante bien. Ahora en verano fresquito es un entrante saludable y sobretodo fácil de hacer.

La receta que hago es una mezcla de varias recetas que he ido encontrando por diferentes webs, he cambiado sobretodo las proporciones, adaptándolas hasta encontrar la que me gusta a mi. Es la siguiente:

Ingredientes

400 gr. de garbanzos cocidos
1 cucharada sopera de comino molido
1 cucharada sopera de Tahina. (pasta de sesamo)
1 limón (mediano)
60 ml. de aceite de oliva
Una pizca de sal (poca)

Preparación (fácil, fácil)

Exprimimos el limón y rallamos con el Microplane un poco de piel para decorar y perfumar. Si los garbanzos son preparados, escurrimos bien y limpiamos bajo el chorro de agua del grifo (necesitamos 400 gr. garbanzos cocidos y escurridos). No cabe decir que a mayor calidad del garbanzo, mayor calidad del hummus, lógica cartesiana.


Trituramos bien todos los ingredientes hasta conseguir una pasta fina. COn la Thermmoix, empiezo en 5 y subo progresivamente hasta 8, después abro "la máquina" y bajo toda la pasta hacia al fondo con "la lengua" (entiéndase el utensilio de cocina que recibe este nombre) y vuelvo a darle otra vez, puedo repetir esta acción 3 o 4 veces aprovechando para probar y rectificar. Para conseguir la textura que nos gusta vamos probando y añadiendo un poco de agua, máximo unos 80-100 ml. Probar nos ayudará también a corregir el punto de sal. Y ya tenemos nuestra Humus, listo para comer con unos palitos de pan, de zanahoria, de apio o con lo que se nos ocurra. A cucharadas también está bueno.

Queda una crema de un color precioso, con una textura cremosa, el punto de acidez y frescura del limón, el aroma a comino y el tostado que nos da la Tahina.

Para servirlo, a mi me gusta ahora bien fresquito, por encima hay quien le pone un poco de aceite de oliva y pimentón dulce. Yo le pongo un poco de ralladura de limón.

Ajoblanco



El ajoblanco, además de una revista cultural, que ha aparecido y desaparecido varias veces, es un plato de la cocina tradicional española. Me parece una crema de lo más moderna. Mi madre, que ya he comentado por aquí que es una cocinera excepcional, lo prepara de vez en cuando en verano. Bien fresquito es ideal para alimentarnos mientras combatimos el calor. Al ser bastante calórico también menos fresco va bien en otras épocas del año, como en la actual.

No os voy a poner las cantidades exactas de los ingredientes, porque cuando he llamado a mi madre, para preguntarle la receta, me ha dicho los ingredientes, del tipo un poco de esto y un poco de aquello. Es el típico plato que debéis ir probando continuamente, añadís algún ingrediente, mezcláis, volvéis a probar, hasta encontrar el ajoblanco que os gusta a vosotros.

En mi caso mi mujer, no es una gran amante del ajo, y yo he puesto muy poco, aún así me ha dicho que estaba muy rico pero que tenía demasiado ajo, para la próxima vez, haré un "Sinajoblanco". Suena a broma, y lo era cuando lo escribía, pero ahora que lo veo escrito, no me parece mala idea, probaré alguna combinación sin ajo, quizás con albahaca o con otra cosa que perfume y no sea ajo, os mantendré informados.

Ingredientes 4 personas
80 gr. de almendras peladas
1 diente de Ajo (mínimo)
4 rebanadas de pan
un buen chorro de vinagre
un poco de aceite
agua
Preparación
Mojar el pan con vinagre y agua. Después ya simplemente triturarlo todo bien fino. Yo lo he hecho con la Thermomix, primero he molido la almendra, 20 segundos velocidad máxima, después he añadido el diente de ajo, y poco a poco he ido echando ingredientes, y lo he tenido a máxima velocidad un rato, digamos un minuto.
Para acompañar el ajoblanco, a modo de tropezones, son ideales unas uvas o unos trocitos de melón.
Estoy encantado con la foto, he usado un fieltro amarillo, que es un material de plástica de mis hijos, como fondo, al poder doblarse que da un fondo perfecto.

Pan de olivas y romero

Mi empresa está cambiando. Cuando todo los gurus de gestión empresarial aconsejan estructuras ágiles, poco jerarquizadas, que permitan aprovechar todo el talento de toda la gente, y poder así reaccionar con rapidez a los cambios y las exigencias de los mercados, y de la sociedad en general, en la empresa en la que trabajo se está limitando a la gente, y se les están quitando responsabilidades y capacidades de decisión.

Al paso que vamos, pronto tendremos que pedir permiso para ir al lavabo, como en el colegio. Difícil de entender en una empresa que trabaja en temas ligados a la Innovación.

Hoy un grupo de personas, cambiaba de área, y con ello de ubicación. Para despedirlos, a la hora de comer hemos organizado un pequeño aperitivo, una fiesta de "hasta luego". Las directrices del aperitivo eran: que cada uno prepare o compre una cosa. Al final no ha sido un aperitivo, ha sido una comida, en la que cada uno ha hecho lo que sabía y podía hacer, coordinada pero libremente, un ejemplo más de trabajo en equipo eficaz.

El equipo en el que trabajo, tiene talento unido a capacidad de trabajar en equipo y además ahora veo que sabe automotivarse. Espero que los cambios que están habiendo, no destruyan este clima tan fructífero, y esa capacidad de superación.
Para el aperitivo yo he hecho un pan-focaccia de olivas y romero.

Ingredientes
500 gr. de harina
20 gr. de levadura prensada
250 ml. de agua
100 ml. de aceite
1/2 cuchara de azúcar
1/2 cuchara de sal
Un poco de romero fresco
Unas aceitunas verdes
Preparación
Precalentar el horno a 200 grados, con un pequeño recipiente con agua en su interior (sobretodo mirad que aguante el calor).

Para hacer la masa del Pan, yo he utilizado la ThermoMix pero no es necesario, se puede hacer a mano, solo que costará un poco más.

He empezado calentado el agua a 37 grados, y disolviendo en ella la levadura y un poco de harina, con la ThermoMix he puesto 37 grados, velocidad 2, Tiempo 2 minutos. Luego he añadido el aceite, y poco a poco el resto de la harina, aumentando la velocidad progresivamente hasta 6 o 7. Después he amasado la masa unos 4 minutos a velocidad "espiga". He picado un poco de romero fresco y lo he añadido a la masa, mientras se amasaba un momento mas (pongamos 1 minuto).

He dejado que la masa creciera durante unos 30 minutos, hasta más o menos ha doblado su volumen, en la Thermomix parece que vaya a salirse, por arriba.

He preparado dos versiones, una con bandeja de las típicas de bizcocho y una con un molde de Plumcake. En los dos casos he recubierto los recipientes de aceite con las manos, para que después no se pegase la masa. Aprovechando que tenía las manos aceitosas, he cogido con ellas la masa, ya que así no se pega a los dedos y facilita mucho la manipulación; la he repartido entre los dos recipientes, aplastándola para cubrir bien todo el fondo de los moldes.

Solo faltaba ya añadir las aceitunas, las he puesto por encima cortadas a trocitos, apretando un poco con el dedo, para que se hundieran en la masa. Luego al horno a 200 grados, durante unos 30-35 minutos, y ya está hecha la focaccia.Ha salido muy buena, la prueba es que había bastante, y ha durado muy poco en la mesa.
La comida de hoy, ha servido para recargar nuestra motivación y coger fuerza para saltar así por encima de los muros, que nos impiden algunas veces hacer bien nuestro trabajo.

Pizza de Calabacín y jamón

Ya comenté que este verano tuve un "Overbooking" de Calabacines. El campo de mi suegro producía más de los que podíamos comer, además estaban riquísimos por lo que debíamos cocinar cosas con calabacín sin parar, ya hablé de la Bruschetta, y del carpaccio.

Para hacer esta pizza de calabacín, utilicé una base preparada de Buitoni, no aconsejo para nada las bases congeladas, nada que ver con la pizza de verdad, mucho mejor las bases de las que hemos hablado que se venden enrolladas, y que ya vienen con el papel para horno. Hacerla a mano, también es muy sencillo, con la Thermomix, es un momento.

Corté los calabacines, como se adivina en la foto, tirando a delgados, y los pase por la sarten con aceite, unos 5 minutos, dándoles la vuelta a los 3 minutos, como no los puse después en el horno, ese era todo el calor que iban a tener. 

Hice la pizza como si fuera una pizza margarita, un poco de tomate encima de la base, y abundante mozarrella por encima, 10-15 minutos a horno 200 grados, y después ya fuera del horno, le puse una capa del calabacín frito, y encima el jamón serrano cortado finito. Riquísima.

Helado de fresas

Ayer por la tarde hice, un helado de fresas (fresones) que hoy nos hemos comido.

Puse unos 10-12 fresones, un poco más de un vaso de leche, y unas 6 cucharadas de azúcar. Quizá esté mejor con un poco más de azúcar, dependerá de la calidad de los fresones, que cada vez son más grandes y tienen menos sabor.

Lo he hecho en dos tiempos en la Thermomix. Primero he triturado todos los ingredientes, y le he dado caña al máximo (al 10) un rato (60 seg), para que cogiera mucho aire. Después lo he puesto en un recipiente tipo tupper bajo y lo he tenido tres horas en el congelador. Lo he sacado del congelador y ya había cristalizado bastante, por lo que "he cortado el hielo", y lo he puesto otra vez al Thermomix, a tope un rato (V10 T60), y al congelador otra vez, de esta manera ha quedado muy cremoso, como se aprecia en la foto.

Lo he acompañado con un poco de requesón (porque lo tenía en casa) y unos trocitos de fresas.

Lo curioso ha sido que mi mujer al ver el color, ha dicho parece artificial, y eso que solo llevaba leche azúcar y fresas. Esto me recuerda a la paradoja de las flores, es la siguiente:

"Cuando vemos una flor natural muy perfecta y brillante, muchas veces decimos o pensamos, parece de plástico, y cuando vemos una flor de plástico muy bien hecha, decimos o pensamos parece de verdad". Pues lo mismo, con este helado supernatural parecía hecho con algunos polvos de colores, de dudosa procedencia.

Para conseguir la forma que se ve en el plato, he mojado una cuchara en agua hirviendo, y al coger el helado con la cuchara, casi automáticamente se hace una quenelle (es la palabra que se usa en cocina para la forma esta).

Rico y natural, aunque el color le pueda parecer a alguien un poco artificial.

Mi receta de tomate frito


La semana pasada publiqué esta receta, en la que usé tomate frito y comenté que hago un tomate frito especial. Dije también que la pondría pronto en este nuestro blog. Como para no cumplir las promesas ya tenemos a nuestro políticos, hoy hablaremos de tomate, de tomate frito.

Tengo que empezar diciendo que me encanta el tomate frito que cocino. Seguramente no se puede considerar como un tomate frito al uso, porque lleva un ingrediente que generalmente no se utiliza para hacer esta salsa, la zanahoria. Si, mi tomate frito lleva zanahoria.

Otro cambio respecto a las recetas tradicionales es que lo hago muy dulce, que unido a las hierbas de la provenza que le añado, le dan un sabor extraordinario, sobre todo para acompañar pasta o unos gnocchi de patata.


Mi receta de Tomate frito

Ingredientes
Un bote pequeño de tomate triturado
Una cebolla
Una zanahoria grande
Dos cucharadas soperas de azúcar
Una cucharadita de hierbas de la provenza.

Preparación

Empiezo diciendo, que como no es fácil encontrar siempre tomates suficientemente maduros, para hacer la receta con tomate natural, ante la duda, es mejor usar el tomate triturado, (ya me entendéis rollo Orlando), porque es tomate maduro, sin piel ni pepitas, y además podéis encontrar algunos de gran calidad. Sobretodo no hagáis esta receta con un tomate medio verde típico de ensalada.


Lo primero que haremos es cortar la cebolla en juliana, y la zanahoria en trozos pequeños (por ejemplo bastoncitos).

Posteriormente en una sartén grande, echamos un buen chorrito de aceite de oliva, y en éste doramos la cebolla
a fuego lento, luego añadimos la zanahoria (6-7 minutos después) y rectificamos de sal. Pasados 5 minutos añadimos el azúcar, es bastante usual para matar la acidez usar el azucar en el tomate frito, pero en este caso le añadimos bastante más de lo habitual, 2-3 cucharadas, tiene que quedar bastante dulce. Removemos un poco y añadimos el tomate triturado. Volvemos a mover (o sea re-movemos) y añadimos las hierbas. Lo tenemos unos 15 minutos a fuego lento sin parar de mover, y pasado este tiempo lo apartamos del fuego.

Ahora viene la gracia de la receta, lo trituramos todo con el Minipimer o con la ThermoMix, con lo que hacemos desaparecer la zanahoria y de paso la cebolla.

Obtendremos un tomate frito, con un color muy bonito, más anaranjado, "supervitaminado" y con un sabor extraordinario.

Sirve para acompañar muchas cosas y a los niños les encanta.

Masa de Pizza


No soy cocinero, pero cuando más cocinero me siento es cuando hago pan. Una variante del pan que me hace sentir feliz en la cocina, es hacer la masa de pizzas.

No siempre tengo tiempo de cocinar, por lo que utilizo muchas veces la masa de pizza Buitoni (la que va enrollada), que está francamente bien. Aquí tenéis una receta con dicha pasta precocinada.

Cuando hago yo mismo la masa, el resultado es bastante bueno, pero el momento en la cocina es fantástico (mejor que el resultado), el manipular la masa, ver como crece, cortarla en trozos, estirarla, es mágico, bien al menos a mi me lo parece.

Hago la receta de masa de Pizza que viene en el libro de la Thermomix, con algunas variaciones, cuando ya la tengo amasada, la trabajó más, la dejo crecer y le vuelvo a dar un meneo. Las fotos que acompañan este post, son del Horno de mi cocina, con dos minipizas que hice con mis hijos recientemente. Les dejé elegir los ingredientes, y montar cada uno su pizza. De esta manera es mas fácil que después se la coman. Los posibles ingredientes a elegir, hay que dejarlos bien claros al principio, si no elegirían los dos una pizza de chocolate. Os dejo aquí la receta de la masa, que uso.

Masa de Pizza

Ingredientes:
200 ml. de agua
50 ml. de aceite
1 cucharadita de sal
20gr. de levadura prensada (se puede conseguir ya en muchos sitios, por ejemplo en Mercadona
400g. de harina

Preparación (con ThermoMix):

Poned en el vaso de la ThermoMix, el agua, el aceite y la sal y programad un par de minutos a 37ºC en velocidad 2.

Añadid la levadura prensada y dejad un minuto con la misma temperatura y velocidad 3, para que se deshaga bien ésta. Poned la harina y amasad 3 minutos (el libro dice 1) en velocidad Espiga.

Retirad la masa del vaso con las manos mojadas en aceite. Es curioso porque funciona!.

Dejad reposar la masa en un plato hondo y grande, tapado con un paño limpio, durante al menos media hora. Éste es un momento mágico.

Aquí yo vuelvo a amasar un poco la masa enharinándola. Estirad la masa dejándola muy fina, sobre papel de horno, y depositad con cuidado en una bandeja de horno.

Poned los ingredientes a vuestro gusto, solo recomiendo no pasarse con el tomate. Si hoy no tenéis mucha inspiración, aquí encontrareis una Pizza diferente, que me encanta.

Ponedla en el horno, precalentado a 225º durante 15 ó 25 min, controlando a partir de los 10. Y a disfrutar.

Pan de especias con la Thermomix



Una de las cosas para las que uso la Thermomix es para amasar pan. Es un lujo comer el pan que has hecho tu mismo. En esta ocasión aprovechando que hoy tengo una comida com mis hermanos y sus respectivas, todos grandes aficionados/das a la cocina, he hecho un pan de especias.

Preparación
600 gr. harina
350 gr. agua
2 cucharaditas de sal
1/2 cucharadita de azúcar integral
42gr. levadura prensada
Especies a tu gusto.

Preparación
En mi caso, he seguido la receta que viene en el libro de la Thermomix (el que te “regalan” al comprarla), pero como quería hacer un pan de especies, le he puesto además en el último momento un poco de comino, hierbas de provenza, extra de tomillo (ya lo llevan las hierbas provenzales) y un pensamiento de curry. Además como sal le he añadido dos buenas cucharadas de sal maldom, ya que había leído que quedaba mejor.

Una de las ventajas de usar la Thermomix es que te ayuda a pesar las cosas, con la balanza que lleva incorporada, y en estas recetas conviene seguir bien las cantidades, menos las especias que es a ojo.

Ponemos en la Thermomix el agua y el azúcar y programar 2 minutos, 37º a la velocidad 2. Agregar la levadura, mezclar unos segundos, incorporar la harina y la sal y programar de 15 a 30 segundos en velocidad 6. Aquí añadimos las especias.

Después a masar en velocidad Espiga durante 6 minutos (en el libro dice 3) pero a mi me gusta que esté más tiempo.

Retirar la masa, y ponedla en el molde o fuente que irá al horno, tapada para que crezca, tiene que llegar ha doblar su volumen. El horno tienen que estar a 225º, y conviene poner un vaso de agua en una esquina del horno. En mi caso he hecho un pan de molde, y panecillos aprovechando un molde de silicona que tengo. La foto de abajo, que parece un pan grande es en realidad un panecillo.

Una vez haya subido la masa, meter la masa en el horno y dejar de 25 a 30 minutos sin abrir el horno en ningún momento. Si vemos que se tuesta demasiado bajar el horno a 200.

El olor de toda la cocina al hacer el pan de especias es algo maravilloso, nunca había olido tan bien, de hecho toda la casa huele a hierbas y pan, mientras esperamos a los comensales.

Helado rápido

Desde hace ya un buen tiempo, tengo siempre un par de cubiteras en el congelador. Hasta aquí diréis pues vaya información, que interesante… La gracia está en que las cubiteras en cuestión en lugar de agua, están llenas de leche.

Las utilizo para hacer helados de cualquier cosa, en cualquier momento. Es muy sencillo pongo en la Thermomix, los cubitos de leche, con mermelada o con fruta natural y tengo rápidamente un estupendo helado de fruta. Lo he probado con fresas, mermelada de fresas, con mango y con plátano.

Las medidas son un poco a ojo, para los 4 de casa (mi mujer y mis dos hijos), pongo una cubitera de leche, supongo que será de unos 300dl, y fruta hasta que coja el sabor y el color deseado, luego un poco de azúcar, aquí también un poco prueba y error, podríamos decir que rectificamos de azúcar, y si la fruta es muy madura y queda muy dulce un chorrito de limón, o sea que rectificamos de limón.

En una ocasión hice un helado de fresas y como no tenia limón y quedaba demasiado dulzón, le puse un poco de vinagre de Modena, recordando unas fresas maceradas en vinagre que hacía un amigo, el resultado fue excelente.

Sin Thermomix o similar, también puede quedar bien pero deberéis esperar a tener los cubitos más descongelados, y no conseguiréis la textura de helado profesional, que se consigue con la Thermomix dándole caña al máximo durante un par de minutos. El resultado es realmente sorprendente. Y podéis hacer un helado en cualquier momento, solo basta tener dos cubiteras en la nevera.

He visto otra opción, que es en lugar de leche normal, utiliza leche evaporada, he encontrado una receta en la que aconseja un bote de leche evaporada y 400 gr. de fruta. Otro truco es congelar la fruta, que está apunto de pasarse, y a la hora de hacer el helado echar la leche de la nevera, es cuestión de probar.


Helado de Rosas


En mi último post prometí hablar de un helado de rosas que hice la semana pasada, para no perder credibilidad (para esto ya están nuestros políticos), aquí va, sencillo sencillo.

Helado de Rosas.

Ingredientes
Mermelada o Jalea de pétalos de rosa
200 ml de Nata
200 ml de Leche
Azúcar al gusto.

Preparación.
Echar unas cucharadas
(3-4) de mermelada de Pétalos de rosa, en la Thermomix, añadir la nata, la leche y un poco de azúcar, mezclar bien a máxima velocidad para que se incorpore aire. Verter el líquido resultante en una cubitera, y al congelador. Cuando esté congelado otra vez a la Thermomix, y caña, si le cuesta podéis añadir un poco de nada líquida. La textura que se consigue con la maquinita en cuestión es super profesional. Con una batidora normal también quedará bueno pero no creo que se consiga el mismo resultado.

Para las cantidades, aconsejo ir probando la mezcla inicial, hasta conseguir el sabor deseado, teniendo en cuenta que tanto el aroma a rosas como el dulzor disminuyen cuando está la preparación congelada. Os aseguro que queda espectacular.

Chupito de guisantes y jamon

Por el primer sentido que impactan los platos es sin duda por la vista, después rápidamente por el olfato y ya seguidamente por el gusto y el tacto simultáneamente. Por esto creo que son importantes los colores en las comidas.

Para hacer un entrante original, sencillo y además bonito, propongo aprovechar
la oportunidad que nos da el verde intenso de los guisantes, unido a su sabor. Como es una receta mía, he puesto las cantidades un poco a ojo, vosotros mismos.

Chupito de guisantes y jamón.

Ingredientes
250 gr de guisantes (a mejor calidad, mejor resultado final, no subestiméis los congelados, si tenéis guisantes de Llavaneras aprovechad la ocasión)
50 cl. de nataAceite
Jamón serrano

Preparación
Hervir los guisantes, en abundante agua. Es necesario que esten hechos, pero no pasarse de cocción, porque perderíamos parte del color. Una vez hervidos, colar y triturar a conciencia (aquí la Thermomix os dará una textura increíble). Añadir al triturado un poco de nata, que le dará untuosidad, no demasiada porque perderíamos color, un poco de aceite y agua de cocción, hay que ir añadiendo agua, e ir mirando, hasta conseguir la textura deseada, la cantidad dependerá de muchos factores entre ellos la calidad de los guisantes.

Cortamos el jamón serrano en tiras finas (como si fuera una juliana fina), y lo freímos un minuto en aceite muy muy caliente, removiendo bien para que no se pegue, nos interesa que quede sueltecito. Apartamos del fuego y ponemos sobre papel absorbente, para eliminar el exceso de aceite.

Para montar el plato, ponemos en un vaso de chupito, un poco de la crema de guisantes, y encima flotando y saliendo del vaso, un poco del jamón crujiente y un poco del aceite de freír el jamón. Servir con cuchara. El dulce de los guisantes con el salado del Jamón hacen una combinación muy buena y además el plato es bonito.

Otra opción sería hacer una espuma de guisantes, en lugar de una crema, la receta sería muy parecida, pero añadiendo más nata, y después de triturar, colocar en un sifón añadir una carga, y a la nevera hasta la hora de servir.

Crema de Calçots

El pasado domingo, organicé una comida en mi casa con mis hermanos y sus familias. Les prometí algo curioso. Desde que tengo este nuestro blog, la gente cuando viene a comer a casa, me exige mucho más.

El sábado cuando estaba preparándome para ir a comprar, me llamaron unos amigos para decirme que se iban el domingo a comer Calçots. En ese momento decidí que haría este plato que os propongo hoy, una crema de calçots.

De segundo hice una ensalada de sardinas marinadas, riquísima, receta que postearé próximamente. Esta ensalada, es un plato que me gusta mucho, pero que no he puesto antes en el blog, porque lo escribí hace un tiempo para alguien, y le he pedido que me pase la receta que le envié, porque me da pereza rescribirla.

Crema de Calçots

Ingredientes
24 calçots asados
300 gr, patata hervida
300 ml de Nata
3 cucharadas de aceite de oliva
salsa romescu

Preparación
Mezclar bien todos los ingredientes menos el romescu, con la batidora, (si lo hacéis con la Thermomix obtendréis una textura genial), y después probar y rectificar el punto de sal.

Ya en el plato adornar con la salsa romescu, que es la que acomaña siempre a los calçots.

Para conseguir el auténtico sabor de los calçots asados a leña, los compre ya hechos en una tienda de delicatessen que tengo cerca de casa. Si los haceis vosotros en el horno, también quedan buenos pero falta el perfume especial de las cosas hechas a leña.


Helado de mandarina

Este helado es muy sencillo de realizar, la gracia está en presentarlo en la propia cáscara de la mandarina, que además de quedar curioso, desprende los aromas de la piel de la mandarina cuando la comes.
A mi me gusta especialmente, porque tengo la suerte de tener en casa de mis padres, un árbol de una variedad antigua de mandarinas, con un perfume especial (recuerda a los caramelos de mandarina). El problema es que tiene multitud de pepitas, por lo que es difícil encontrarlas en los mercados.

Como sabéis, tienden a ofrecernos frutas sin pepitas y quizás más bonitas y más grandes, aunque perdamos en aromas, yo personalmente estoy seguro que es un error, el 99% estaréis de acuerdo, el 1% restante, es como los dentistas que aconsejan chicles con azúcar.

Para realizar el helado, empezamos seccionando (cortando) la parte superior de la mandarina, a una altura de unos 4 /5 de la misma, y sacamos por arriba toda la pulpa de la fruta, es bastante costoso, se hace más sencillo haciendo el agujero más grande, por ejemplo a 3/4. Reservamos las dos partes de la piel de mandarina, una hará de tapa y la otra de recipiente posteriormente

Trituramos la pulpa obtenida (pepitas incluidas) hasta conseguir una pasta, que pasamos por un Chino. El jugo obtenido lo medimos y mezclamos la misma cantidad de nata liquida que de zumo. El azúcar lo añadimos a gusto, (poner y probar), no me atrevo aquí a poner una cantidad de azúcar porque dependerá mucho de las mandarinas que utilicéis.

Si no tenemos heladera, conviene ponerlo en un cacharro en el congelador y cada hora sacarlo y removerlo bien, para romper los cristales que se forman, pasadas unas2 3 horas, rellenaremos las mandarinas con esta pasta aun no congelada del todo. Si guardamos las dos partes de las mandarinas, la podremos cerrar. Si la piel de la mandarina que utilizamos no es muy aromática, podemos servirlo en otro recipiente. En este caso yo aconsejo poner la preparación en cubiteras y de allí a la thermomix (o similar) con lo que conseguiremos una textura casi de restaurante. El que disponga de una Paco Jet, que aproveche.

Ketchup con ThermoMix


A mi me gusta el Ketchup, que le vamos a hacer. Unas patatas fritas o una tortilla de patatas con un poco de Ketchup me parecen geniales. Como en todas las cosas, hay Ketchups y Ketchups, a mi de los comerciales el que me gusta más es sin duda el de la marca Heinz.

A mi me gusta la cocina, y no me veo haciendo un plato un poco elaborado y echándole después ketchup, de hecho solo me gusta en los dos casos citados anteriormente, ambos con patatas. En una revista de cocina con ThermoMix, he encontrado la solución, una receta de esta conocida salsa de tomate. Claro poniendo en una receta elaborada un Ketchup casero la cosa cambia.

Ketchup casero

Ingredientes
1 Kg de tomates
150 gr. de tomate deshidratado
1 cuch. de cafe de Sal
2 cuch. soperas de salsa Worcestershire
1 cuch. sopera de vinagre de Jerez
3 clavos de olor
1 cuch. de café de pimienta (5 bayas)
1 cuch. de café de nuez moscada
1 cuch. de café de canela molida

Preparación
Lavar bien los tomates y ponerlos en la Thermoxi (o en otro recipiente para luego triturarlos) cortados en cuartos con la sal, Triturar muy bien (con la Thermomix, hacerlo a velocidad progrssiva 5 7 9 durante al menos 1 minuto).

Añadir los tomates deshidratados cortados en tiras (antes los habremos tenido 10 minutos en agua) y programar 30 minutos temperatura 90 grados y velocidad 2 y medio.

Añadir el resto de los ingredientes y programar 20 minutos más a la misma temperatura y velocidad. Dejar enfriar completamente. En función del agua que lleven los tomates quedará más espesa o menos. Si resulta demasiado espesa, se puede añadir agua y batir enérgicamente un momento. Si en cambio resulta demasiado clarita, bastará con añadir 1 o 2 cucharadas de maizena (harina fina de maíz ), y programar 5 minutos y velocidad 2 y medio. Para evitar las pepitas se puede pasar por un pasapurés, pero creo que así quedará más auténtica.

Por si la haces sin Thermomix, la velocidad 2 y medio equivale a remover con la cuchara.

Suerte.

Emulsión de remolacha con Huevas i Queso


Ingredientes (para 4 personas):
4 remolachas
1 diente de ajo
300 gramos de aceite de oliva
500 ml. de agua
1 dl. de vinagre de jerez
1 cucharada de postre de jengibre
20 gr de queso
40 gr de huevas de arenque
Eneldo

Elaboración
Limpiamos y pelamos las remolachas, y las echamos troceadas a la Thermomix. Le añadimos el agua, el diente de ajo pelado, la cucharadita de jengibre y la sal.

Emulsionamos hasta conseguir una crema ligera. A continuación le añadimos el aceite de oliva para que no pierda color y el vinagre de jerez para aderezarla. Lo mezclamos despacio con una varilla y lo servimos en cuencos individuales. Decoramos con los dados de queso azul, las huevas de arenque y un cordón de aceite de hierbas. Finalizamos con la hoja de eneldo.